Comercio justo en Israel para fomentar el desarrollo de la población árabe.

Palestinos e israelíes trabajan juntos desde hace años en la cooperativa "Sindyanna of Galilee". 

Este proyecto y otros se presentaron en Madrid dentro de la jornada:

"El comercio justo, eficaz herramienta de cooperación al desarrollo".

El Comercio Justo es un sistema comercial basado en el diálogo, la transparencia y el respeto, que busca una mayor equidad en el comercio internacional.

Contribuye al desarrollo sostenible al ofrecer mejores condiciones comerciales y asegurar los derechos de productores y trabajadores desfavorecidos.

El 20% de la población israelí es árabe, aproximadamente 1.300.000 personas que viven en Israel tienen nacionalidad israelí pero su lengua es el árabe y su religión no judía.

Si bien es cierto que desde 1952 cuentan con los mismos derechos y obligaciones que los israelíes, la realidad demuestra que la afirmación no se cumple.

El 70% de su población es pobre, uno de cada tres niños vive por debajo de la línea de pobreza y el paro asciende al 25%.

Sólo el 17% de las mujeres árabes trabaja, frente al 52% de las israelíes.

Para reducir esas grandes e injustas diferencias nació en 1996 "Sindyanna of Galilee" (“Roble de Galilea” en castellano), una cooperativa de comercio justo en la que tanto mujeres palestinas como israelíes, y también hombres, trabajan por un mismo objetivo:

“Crear una sociedad en la que todas las personas tengan acceso a los mismos derechos en el epicentro del conflicto”.

Su misión y su trabajo diario fueron expuestos en la jornada ‘El Comercio Justo, eficaz herramienta de Cooperación al Desarrollo’, un encuentro celebrado en Madrid, y organizado por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ) y La Casa Encendida.

“Sindyanna of Galilee”, organización de Comercio Justo situada en Galilea, es parte de una red social que opera en el contexto del conflicto israelí-palestino y en una sociedad étnicamente dividida en dos grupos: judíos y árabes.

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¡Su enfoque es universal!

Árabes y judíos trabajan mano a mano, unidos por su visión común. La red incluye, además de Sindyanna, el "Workers Advice Center" (WAC–Centro de Asesoramiento de los Trabajadores) y la editorial “Hanitzotz Publishing House”.

Su visión es la de crear una sociedad en que todas las personas tengan acceso a los mismos derechos y oportunidades, con un énfasis en los derechos de la mujer y su derecho al trabajo.

Esta visión está estrechamente conectada con la posibilidad de alcanzar la paz entre las dos partes que están en conflicto y de acuerdo con la legislación internacional.

Sindyanna, activa desde hace 10 años, trata de crear condiciones que favorezcan el desarrollo y puestos de trabajo para mujeres árabes.

Invierten sus recursos en cultivos autóctonos, producción de artesanías y jabón, para mantener y hacer revivir esos productos nativos.

Hacen esto siendo fieles a su nombre, "Sindyanna of Galilee" –árbol símbolo de firmeza y fuerza–.

Esther Lilfsitz-Erlich y Asma Aghbarieh, dos trabajadoras del proyecto, se encargaron de describir a Sindyanna of Galilee.

“Por una parte trabajamos para fomentar el desarrollo económico y agrícola del sector árabe a través de productos de comercio justo.

Hay que tener en cuenta que tras la guerra de 1948, el 70% de las tierras agrícolas fueron expropiadas a su población árabe”, introdujo Ester, que explica que el segundo pilar de la cooperativa se centra en “la promoción de la mujer, donde el trabajo es la herramienta fundamental para su desarrollo y protagonismo”.

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Asma Aghbarieh, responsable del área de protagonismo, señala que desde la cooperativa “buscamos trabajo y sueldo digno a las mujeres y tratamos de evitar así que el Gobierno traiga mano de obra barata de Asia, a quienes paga por debajo del sueldo mínimo".

"Además, hacemos una labor de protagonismo muy fuerte con las mujeres, ya que la mentalidad tradicional de las familias árabes sigue marcando que es el hombre quien tiene que mantener a la familia”, añade.


En la actualidad más de 200 mujeres trabajan en Sindyanna, y muchas reciben formación cada año en tejido de cestas y apicultura.

La ONG "Sindyanna of Galilee" invierte sus recursos en cultivos autóctonos, producción de artesanías y jabón, para mantener y hacer revivir esos productos.

Entre los productos que comercializan y exportan a Australia, Estados Unidos, Europa y Japón destacan el aceite de oliva, las cestas de ramas de dátiles, la especia "za´atar" y el jabón de aceite de oliva.

Este último producto, que proviene del territorio palestino de Nablús, se venderá en breve en las tiendas de comercio justo de España gracias a la iniciativa de Alternativa3.

Apuesta por la paz

Junto a la mejora de las condiciones de vida de la población árabe, es indiscutible el papel integrador que emana "Sindyanna of Galilee", que convierte el comercio justo en una herramienta de reconciliación y superación del conflicto entre población palestina e israelí.

“La idea provoca una revolución en las personas, deja pensando a los consumidores que ven que la solidaridad se extiende más allá de los límites de la identidad de uno mismo”, apunta Asma.

La incursión no es sencilla porque la división es grande, pero la labor de la red social formada por Sindyanna, el Workers Advice Center (WAC–Centro de Asesoramiento de los Trabajadores) y la editorial Hanitzotz Publishing House es cada vez más visible y reconocida.

Comercio justo y ayuda humanitaria

Durante estas jornadas, en Madrid, se pudo además, hablar sobre el tejido productivo de comercio justo en zonas afectadas por desastres naturales.

A este respecto, Carolina Reintjes, responsable de la organización IDEAS, destacó la necesidad de crear alianzas con ONG que trabajan en ayuda humanitaria, actuar conjuntamente en la prevención de las catástrofes mal llamadas naturales y presionar para lograr una voluntad política y social que evita dramáticas consecuencias.

En el encuentro tuvieron voz tanto organizaciones productoras del Sur como importadoras del Norte.

¿Qué puedo hacer yo?

Consume productos de comercio justo, con ello garantizarás que se paguen precios justos a las trabajadoras y trabajadores, que se protejan los derechos fundamentales de las personas y que se obtengan productos de calidad con procesos respetuosos con el medio ambiente y el ser humano.

Las señoras Roni Ben Efrat y Ester Lifsitz-Erlich, son representantes de "Sindyanna of Galilee", organización de productores situada en Israel, un proyecto en el cual mujeres que viven en una zona de conflicto (Israel-Palestina), de uno y otro lado, trabajan juntas para construir una realidad mejor y con el objetivo de fomentar la paz.

Para más información:
Sindyanna of Galilee

Coordinadora Estatal de Comercio Justo
Espacio por un Comercio Justo

Fuente:
http://www.canalsolidario.org
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"De aquel que opina que el dinero puede hacerlo todo, cabe sospechar con fundamento que será capaz de hacer cualquier cosa por dinero"
(Benjamín Franklin).

 

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