Desde el punto de vista nutricional, el queso constituía junto a los lácteos uno de los pilares nutricionales en la dieta mediterránea; hoy recientes estudios le otorgan, además de un alto efecto sacian y un elevado alto proteico, la "capacidad de prevenir las caries".

Y es que masticar una porción de queso después de ingerir dulces, estimula la producción de saliva que contiene calcio y fosfato (re-mineralizantes del esmalte dental) y neutraliza el Ph de la placa.

Muchos tipos de queso estimulan también el flujo salival, lo que ayuda a limpiar la cavidad bucal de restos de alimentos, amortiguando también el medio ácido.

El queso es una fuente de calcio, fósforo, zinc y magnesio.
El queso ayuda a controlar la presión arterial debido a la presencia de unos péptidos, pequeñas moléculas que se encuentran en importantes cantidades en algunos quesos, que contribuyen a disminuirla y aporta el calcio necesario para mantener unos huesos sin osteoporosis.
El queso no contiene glúcidos; la lactosa se transforma en acido láctico durante la fermentación. También contiene vitaminas B2 y B12. Los quesos fermentados son ricos en vitamina A.

Los quesos son un alimento que se puede consumir en casi todas las edades y en todos los estados fisiológicos.
Es importante destacar que las personas que tienen intolerancia a la lactosa pueden comer este alimento, pues aunque pertenece al grupo de los lácteos, en el producto elaborado no hay lactosa (excepto en los quesos frescos).
Los intolerantes a la lactosa también pueden comer yogur; el yogur es leche fermentada por bacterias como Lactobacillus y Streptococcus thermopilus. Estas bacterias disminuyen la concentración de lactosa a niveles muy bajos.

El yogur es otro alimento que previene enfermedades dentales como la periodontitis – una enfermedad bucal que puede dejar sin soporte óseo al diente. Este beneficio no está relacionado con su riqueza en calcio, sino con la presencia d bacterias del género Lactobacillus.
El yogur contiene vitaminas A, B, C y minerales como potasio y magnesio.

Recordemos otros beneficios del yogur:
-    Previene y mejora los síntomas diarreicos porque restablecen la flora microbiana intestinal.
-    Los pro-bióticos fortalecen el sistema inmunológico y protegen al organismo de infecciones gastrointestinales.
-    Un yogur natural descremado aporta 400mg de calcio fácilmente absorbible, por lo tanto llega al hueso.

   
Fuente: Artículo publicado en “Journal of Periodontology”

Utilizamos cookies para asegurar que damos la mejor experiencia al usuario en nuestra página web. Al utilizar nuestros servicios, aceptas el uso que hacemos de las cookies.